No se puede negar que la calle 30 es un espacio bastante atractivo, ya que esta lleno de grande letreros, causando así distracción en quien transita por estas coloridas calles, las luces, las tipografías, tamaños capturan rápidamente la atención de peatones, incluso de conductores, es evidente la contaminación visual es tan nociva como cualquier otro tipo de contaminación, cada persona tiene derecho a mirar libremente
La contaminación visual no solamente afecta a personas adultas, si no también a niños que transcurres por el sector, la carga de publicidad parece no ser controlada por ninguna entidad, y su crecimiento tampoco parece ser manejado por nadie, como decía anteriormente todos tenemos derecho a mirar libremente, y en este caso no se cumple esta frase, la publicidad se apodera cada vez mas de este sector, ya no solo se utilizan las fachadas de cada negocio, si no también que se alquilan aires o terrazas para poner una sencillas vallas de tan solo 4 x 6 metros, donde no se publicita nada de el lugar, si no grandes marcas a nivel nacional o mundial aportando aun mas con este problema que parece no preocuparle a muchos, ya que el 72% de las personas entrevistas opinan que si hay lugar contaminación visual en el sector, pero ninguno ha hecho nada para evitarla, o contrarrestarla.
Un punto importante es la variedad de gráficos, tipografías y colores presentes en este sector, pero claramente no se presenta ninguna unidad grafica, y los avisos son de el ancho de cada negocio, nadie se arriesga o quiere pasar desapercibido, esta saturación de publicidad afecta a la salud de las personas que transitan a diario o constantemente en el sector, causando estrés, dolores de cabeza y otros síntomas a eso sumándosele, el ruido de los carros, buses y música de los bares, billares y casinos.
Entre las 4 cuadras que elegimos hay aproximadamente 125 negocios y casi el doble en publicidad, sin mencionar que los teléfonos públicos, postes, paredes y sin dejar a un lado el mismo metroplus cargado de letreros publicitarios, donde es evidente lo característico de nuestro entorno, específicamente el cultural, aquí en este punto es donde es evidente observar todo aquello que nos a formado con paisas y como cultura, desde los nombres, diseños, y gráficos se ve plasmado ese empuje o los nombres particulares que algún día marcaron a alguien, y aunque la contaminación visual, mirándolo desde la aglomeración y saturación es bastante negativa, viéndolo desde la carga simbólica que posee cada una de ellas puede verse esta practica tal vez positiva, porque allí esta plasmado aquello con lo que crecimos y nos formaron.
No podemos dejar a un lado la contaminación visual nocturna, la iluminación comienza a jugar su papel, las cajas luminosas todas encendidas, las vallas puestas en edificios o terrazas están casi siempre cargadas de reflectores para hacerse visibles a grandes distancias, también se le suman la fuerte, exagerada y colorida iluminación de los casinos y toda clase de vitrinas comerciales como godiva, guía cereza, alquitrajes, entre otros.
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